Esta es otra receta de mi padre, nos enseño junto con mi madre a comer de todo y a saber apreciar cada alimento que tomábamos y que aun tomamos.
En realidad no soy muy fan de cordero, pero si hay ciertas partes que me gustan mucho y las demás creo que no le he puesto mucho empeño.
Ingrediente:
1 asadura de cordero, 2 cebollas dulces, 1 cabeza de ajos, 1 pimiento seco o ñora, 1 guindilla cayena, 1 vaso de vino oloroso, 1 cucharadita de tomillo, aceite de oliva virgen extra, sal.
Preparación:
Limpiamos y cortamos en trocitos la asadura, la dejamos unos 10 minutos en agua fría para desangrar y después la ponemos a escurrir.
Pelamos y laminamos los ajos; en una sartén echamos un chorrito de aceite y freímos los ajos con la guindilla. Cuando empiecen a dorar echamos la asadura, el pimiento seco y salamos al gusto y dejamos freír 10 minutos a fuego medio, iremos moviendo para que no se queme.
Pelamos y cortamos la cebolla en trozos no muy grandes y la añadimos a la asadura, removemos bien para que se integre y dejaremos freír hasta que la cebolla este transparente, entonces añadimos el tomillo y el vino, mezclamos todo.
Si es necesario podemos echar medio vaso de agua y dejamos cocinar a fuego medio-bajo hasta que la asadura este tierna y la salsa haya reducido.
Se sirve caliente y si la acompañamos con unas patatas fritas esta mas rica todavía.
Espero que os guste!!
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